En la actualidad la conducta adictiva de fumar cigarrillos ha recibido una
gran atención por parte de los Psicólogos.
El tabaco produce dependencia por una de las sustancias que contiene, la
nicotina, alcaloide que crea adicción, y que sólo se encuentra en la planta del
tabaco. (Becoña, E. 1998).
Introducción
El consumo de
tabaco es uno de los principales factores de riesgo de varias enfermedades
crónicas, como el cáncer y las enfermedades pulmonares y cardiovasculares. A
pesar de ello, su consumo está muy extendido en el mundo. Varios países
disponen de leyes que restringen la publicidad del tabaco, regulan quién puede
comprar y consumir productos del tabaco, y dónde se puede fumar.
Las personas inician con su
consumo por motivos psicosociales como son, la curiosidad, rebeldía, confianza
social y demás, estos factores como los fisiológicos (nicotina) son los
responsables directos del mantenimiento de esta conducta.
Muchas personas
intentan abandonar el consumo de tabaco debido a problemas de salud, provocadas
por el mismo, pero todo tiene un proceso y no es algo fácil dejar su consumo,
en el tratamiento o intento por dejar de fumar existen recaídas. El principal
síntoma, en los fumadores dependientes, es la necesidad imperiosa o compulsiva de
volver a consumir la sustancia para experimentar la recompensa que produce y
para evitar el síndrome de abstinencia.
En la actualidad existe consenso que las intervenciones de cesación del tabaquismo deben tener dos componentes: tratamiento psico-social y tratamiento farmacológico. (Bello, 2009).
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Tratamiento farmacológico |
Existen diversas técnicas para evitar su consumo, por ejemplo, se encuentra la técnica llamada RGINA de Foxx y Brown, la cual se aplica para la reducción gradual de ingestión de nicotina y alquitrán. (Becoña, E. 1998).
En muchas
ocasiones los tratamientos se han visto afectados o entorpecidos por la presión
de los padres, modelos familiares fumadores, por el contexto en el que se
desenvuelven y por los medios de comunicación masiva; los cuales no muestran la
realidad de los diversos problemas que causa a la salud.
Definición de Tabaquismo.
El concepto
de tabaquismo ha evolucionado desde los años 60 donde se consideraba más un
hábito, en los años 70 pasó a ser considerado como dependencia, a mediados de
los 80 fue enunciado como adicción.
Actualmente,
el tabaquismo, es una enfermedad crónica sistémica que pertenece al grupo de las
adicciones, clasificada como trastorno mental en el Manual diagnóstico y
estadístico de los trastornos mentales (DSM IV) y en la Clasificación
Internacional de Enfermedades (CIE-10) de la OMS, con criterios
diagnósticos similares. (Bello, 2009).
La persona
que fuma adquiere una dependencia física y mental por la nicotina. Esta última,
más allá del efecto adictivo, ayuda a aliviar los síntomas de la ansiedad y de
igual manera tiene una utilidad como antidepresivo.